Unas 600 personas, según los convocantes, se han concentrado hoy a las puertas de Minas de Almadén, propiedad de SEPI, para exigir a la Sociedad Estatal que cumpla con los acuerdos firmados con la localidad ciudadrealeña hace ya más de 20 años.
Convocadas por la Plataforma ciudadana Forzados, la Asociación de Defensores de Castilseras y la Asociación juvenil “Fuerte de la Mina” los manifestantes han recordado que desde que en 2003 se firmara el despido masivo de trabajadores de la mina de mercurio “las inversiones en la comarca han sido ninguna, la creación de empleo prometida para paliar el déficit laboral ha sido cero y el prometido plan de reindustrialización de la zona inexistente”.
Además, han rescatado el acuerdo firmado por SEPI, Mayasa y Ayuntamiento de Almadén en 2005 donde se recogía la implantación de empresas a través de SEPIDES, “que nunca se ha producido”, la creación de un polígono industrial de 90.000 metros cuadrados “que no se ha construido” o la cesión de inmuebles de Mayasa para la creación, entre otros, de una Escuela de Hostelería “de la que no existe ni siquiera un proyecto”.
Según los manifestantes, “estas eran tan solo algunas de las medidas firmadas para compensar los efectos del cese de la actividad minera que acabó en 2003 con más de 200 prejubilaciones de Mayasa” y, tras más de 20 años “SEPI sigue sin cumplir ninguno de ellos mientras sigue liquidando Minas de Almadén”.
En estos años, han señalado, “la población de Almadén ha pasado de 14.000 a 5.000 habitantes y el descenso poblacional de la comarca se sitúa en el 60%” sin que “ninguno de los Gobiernos haya hecho nada al respecto salvo dejar morir a esta zona minera que tanto dio al Estado español durante siglos y siglos”.
También han pedido que la Dehesa de Castilseras, finca de propiedad de Mayasa con más de 9.000 hectáreas “y que está infrautilizada, revierta en los habitantes de la zona puesto que puede ser un gran revulsivo a la hora de que se implanten empresas y creen puestos de trabajo”.
Los manifestantes, con lemas como “SEPI más de 20 años de incumplimiento”, “SEPI cumple ya” o “Castilseras, 9.000 hectáreas de abandono político” se han emplazado a seguir con más actos reivindicativos incluyendo protestas en la calle Velázquez de Madrid, sede de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales.

Unas 600 personas, según los convocantes, se han concentrado hoy a las puertas de Minas de Almadén, propiedad de SEPI, para exigir a la Sociedad Estatal que cumpla con los acuerdos firmados con la localidad ciudadrealeña hace ya más de 20 años.
Convocadas por la Plataforma ciudadana Forzados, la Asociación de Defensores de Castilseras y la Asociación juvenil “Fuerte de la Mina” los manifestantes han recordado que desde que en 2003 se firmara el despido masivo de trabajadores de la mina de mercurio “las inversiones en la comarca han sido ninguna, la creación de empleo prometida para paliar el déficit laboral ha sido cero y el prometido plan de reindustrialización de la zona inexistente”.
Además, han rescatado el acuerdo firmado por SEPI, Mayasa y Ayuntamiento de Almadén en 2005 donde se recogía la implantación de empresas a través de SEPIDES, “que nunca se ha producido”, la creación de un polígono industrial de 90.000 metros cuadrados “que no se ha construido” o la cesión de inmuebles de Mayasa para la creación, entre otros, de una Escuela de Hostelería “de la que no existe ni siquiera un proyecto”.
Según los manifestantes, “estas eran tan solo algunas de las medidas firmadas para compensar los efectos del cese de la actividad minera que acabó en 2003 con más de 200 prejubilaciones de Mayasa” y, tras más de 20 años “SEPI sigue sin cumplir ninguno de ellos mientras sigue liquidando Minas de Almadén”.
En estos años, han señalado, “la población de Almadén ha pasado de 14.000 a 5.000 habitantes y el descenso poblacional de la comarca se sitúa en el 60%” sin que “ninguno de los Gobiernos haya hecho nada al respecto salvo dejar morir a esta zona minera que tanto dio al Estado español durante siglos y siglos”.
También han pedido que la Dehesa de Castilseras, finca de propiedad de Mayasa con más de 9.000 hectáreas “y que está infrautilizada, revierta en los habitantes de la zona puesto que puede ser un gran revulsivo a la hora de que se implanten empresas y creen puestos de trabajo”.
Los manifestantes, con lemas como “SEPI más de 20 años de incumplimiento”, “SEPI cumple ya” o “Castilseras, 9.000 hectáreas de abandono político” se han emplazado a seguir con más actos reivindicativos incluyendo protestas en la calle Velázquez de Madrid, sede de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales.